Proteger el medio marino

Fondeo responsable

Cuando en esta guía se habla de fondeo nos referimos a un fondeo responsable, que no se hará nunca sobre praderas de posidonia oceánica o sobre otras especies que también es necesario proteger. Hay que tener siempre en cuenta que un cambio en las condiciones meteorológicas puede provocar el borneo de la embarcación; por tanto, hay que mantener un margen prudencial para poder asumir esta circunstancia. 

 

También hay que tener esto en cuenta si se fondea cerca del límite de la zona de baño, porque un cambio en las condiciones de viento o de corriente pueden hacer que el barco invada esta área, normalmente balizada. Y, finalmente, a la hora de levar el ancla, no hay que arrastrarla nunca por el fondo marino. Hay que situar el barco en la perpendicular del ancla y, entonces, levarla sin causar daño a nada

La  convivencia con otras embarcaciones y con los bañistas

Cuando salimos a navegar no estamos solos. De la misma manera que hay que proteger el medio marino, también hay que respetar a los demás, empezando por prestar ayuda siempre que se nos requiera. Nunca sabemos con lo que nos podemos encontrar en el mar y la ayuda puede ser necesaria en el momento más inesperado. Si su barco es mediano o grande, respete a las embarcaciones menores y preste siempre atención a los objetos flotantes y a los bañistas. Evite el ruido innecesario, que no hará más que molestar y provocará rechazo de los demás hacia el sector náutico.

Respete siempre los límites de velocidad, sobre todo cuando se acerque a las entradas de las calas y especialmente en la navegación dentro de los puertos. Es sabido que en estos casos la velocidad máxima es de 3 nudos. Y, como siempre, sea prudente y salga a navegar y a disfrutar de la náutica habiendo consultado previamente las informaciones meteorológicas y su evolución durante el día.

Los buenos hábitos que no hay que perder

A bordo, haga un uso racional del agua y ahorre energía siempre que pueda, aprovechando la luz natural y desconectando los dispositivos eléctricos o electrónicos cuando no sea necesario utilizarlos. Y, por descontado, no vierta ningún tipo de residuo al mar. En tierra, deposítelos en los contenedores específicos de que disponen los puertos deportivos para cada tipo de residuos

 

La Costa Brava es un entorno privilegiado y su conservación nos permitirá disfrutarlo ahora y a las futuras generaciones. Por eso, conocer su fragilidad es una buena oportunidad para ayudar a preservarla. 

Los puertos trabajamos en la Agenda 2030